No nos gusta pensar que nuestros perros se estresan. A menudo son los que alivian nuestra propia ansiedad y pueden ser unos increíbles pilares de apoyo. Aunque no se enfrenten a los mismos problemas que los humanos, los perros pueden verse gravemente afectados por el estrés. En casos crónicos, puede ser muy perjudicial para su salud. Por este motivo, debemos determinar por qué un perro se estresa tanto.
Analizamos las principales razones por las que un perro está estresado, qué síntomas presentan los perros con estrés y qué podemos hacer como cuidadores para aliviar su estrés.
¿Por qué los perros se estresan?
Para entender por qué nuestro perro se estresa, necesitamos entender lo que experimenta. El estrés es una respuesta automática que genera el organismo del perro ante un estímulo específico. Tal estímulo pueden ser muchas cosas, incluso o especialmente cosas que no interpretamos necesariamente como factores estresantes. Para un perro, puede ser otro perro, una persona, un coche o incluso un entorno que no les agrada.
El estrés es una parte importante del organismo de un perro. Envía señales a su cuerpo que pueden ayudar si realmente están en peligro. Por ejemplo, cuando un perro ve a otro perro, la liberación de adrenalina acompañada de estrés puede ayudarlo a evadir la situación o defenderse. Sin embargo, cuando el estrés es excesivo, significa que su cuerpo se ve afectado negativamente sin motivo alguno.
Estas reacciones negativas suelen estar relacionadas con sentimientos de inseguridad.
Existen varios factores contribuyen al bienestar de un perro. Estos están representados en las cinco libertades del bienestar animal:
- Libre de sed, hambre y desnutrición.
- Libertad de incomodidad.
- Libre de dolor, enfermedad y lesiones.
- Libertad de expresión.
- Libertad del miedo y el estrés.
Cuando se cumplen las primeras cuatro libertades, es más probable que el perro esté libre de miedo y estrés. Sin embargo, existen algunas razones específicas por las que un perro puede estar estresado.
Causas comunes de estrés en perros
Estas son algunas razones específicas por las que un perro puede estresarse:
- Socialización inadecuada: cómo un perro se relaciona con los demás es una parte vital para mantener su bienestar. Esto es especialmente así cuando son jóvenes, ya que sus primeras experiencias los definirán de muchas maneras. Si se descuida este período de socialización o si tienen experiencias negativas, puede generar estrés en el futuro.
- Falta de cuidados básicos: cuando a los perros no se les proporciona cobijo, comida, ejercicio, compañía o alguna de sus necesidades básicas, se sentirán inseguros y desarrollarán estrés. Nuestra responsabilidad en la adopción de un perro pasa por satisfacer sus necesidades, algo que requiere capital, compromiso y tiempo.
- Educación inadecuada: podemos educar y adiestrar a nuestro perro de diferentes maneras y cada perro tendrá sus necesidades individuales. Sin embargo, nunca se recomienda el refuerzo negativo de la educación. Cuando regañamos, gritamos o usamos violencia física contra un perro será contraproducente para su aprendizaje y es probable que se traduzca en estrés y trastornos de conducta.
- Cambios ambientales: los cambios en el entorno pueden generar sentimientos de estrés debido al miedo a lo desconocido. Traer un nuevo perro a la casa, cambiar de dirección, tener un bebé o hacer cualquier cambio puede ser estresante, especialmente si el perro no cuenta con apoyo durante todo el proceso.
- Trauma: si el perro ha sufrido un accidente, ha sido atacado por otro animal o sufre algún tipo de trauma, puede llegar a sufrir estrés. Se puede provocar más ansiedad si encuentran algún estímulo que les recuerde su trauma.
Síntomas de estrés en perros
Los signos de estrés en los perros incluyen:
- Estereotipias: se trata de comportamientos o movimientos repetitivos que no tienen una función evidente. Un estereotipo común en las perreras se puede ver cuando los perros caminan en círculos durante períodos prolongados. También pueden lamerse áreas de la piel con obsesión, comer objetos extraños o mostrar otros comportamientos que pueden acabar en daño físico.
- Agresión: cuando un perro se encuentra en una situación estresante, puede temer que su seguridad se vea comprometida y se vuelva agresivo como reacción. Cuando el estrés se prolonga, el comportamiento agresivo puede intensificarse.
- Apatía: como se dijo anteriormente, los perros son individuos. No todos reaccionarán al estrés de la misma manera. Mientras que algunos pueden volverse agresivos, otros pueden encerrarse en sí mismos y eventualmente volverse apáticos y deprimidos.
- Exceso de actividad: hay que distinguirlo de un perro naturalmente hiperactivo. Esto último puede deberse a varias razones, no necesariamente insalubres. Sin embargo, es probable que a un perro estresado le resulte difícil relajarse.
- Miedo: el miedo generalizado es un resultado común del estrés. Cuando el perro está en entornos que no representan ninguna amenaza, puede mostrar signos de miedo debido a otros factores estresantes.
- Expresión excesiva: los perros estresados son más propensos a responder a los estímulos de forma innecesaria. Cuando escuchan un ruido o sienten una perturbación, es más probable que un perro estresado ladre o gruña. También pueden ladrar cuando no estamos o, en general, hacer mucho alboroto.
¿Cómo se trata el estrés en los perros?
Lo primero que debemos hacer cuando observamos signos de estrés en nuestro perro es comprender la causa subyacente. Las razones anteriores para el estrés canino pueden proporcionar alguna ayuda, pero es importante que los llevemos a un veterinario para diferenciar si su comportamiento viene en relación a algún malestar físico o enfermedad, o si se trata de algó emocional.
Una vez evaluadas las necesidades específicas del perro e implementar planes de educación y entrenamiento para ayudar a aliviar los problemas de estrés, también hay algunos pasos básicos que puedes seguir en casa para ayudar a reducir el estrés.
Incluyen:
- Satisfacer las necesidades básicas del perro: revisar los cuidados del perro y asegurarse de que esté recibiendo el tipo de alimento adecuado en el momento adecuado. Asegúrate de que tenga los niveles adecuados de ejercicio y esta es otra razón para visitar al veterinario, ya que también podrá ayudar a determinar si sufre alguna deficiencia nutricional.
- Proporcionar más educación: si el perro ha tenido entrenamiento antes, reforzar su educación tendrá un efecto positivo. Permite que el perro tenga más oportunidades de pasar tiempo socializando, proporciona ejercicio, recompensa y lo estimula cognitivamente, todos factores para mejorar la sensación de estrés.
- Enriquecimiento ambiental: si la falta de estimulación genera estrés, una forma importante de ayudar a un perro es mejorando su entorno. Proporciona juguetes, juegos de inteligencia, un área de descanso acogedora y otros accesorios que ayudarán al perro en su bienestar.
- Pasad tiempo juntos: incluso si no podéis estar cerca todo el tiempo, deben hacer que el tiempo que tengan juntos sea especial. Más que llevarlos a sus necesarios paseos, darles masajes, acariciarlos regularmente, animarlos en general y buscar actividades que podáis hacer juntos. Todo esto contribuirá en gran medida a eliminar los sentimientos de estrés de tu perro.
Entender por qué un perro está estresado es muy importante para seguir avanzando en su bienestar. Una vez que hayas descartado un problema físico y hayas probado los pasos anteriores, debes mejorar su calidad de vida y aliviar el estrés. Recuerda conocer al perro y actuar de acuerdo con sus necesidades individuales. Si después de todo sigue estresado, puede ser hora de hablar con un profesional.