El slow loris, loris lento o loris perezoso es un primate relativamente poco conocido, a pesar de que, lamentablemente, su tráfico ilegal se ha incrementado en los últimos años de forma exponencial. ¿Quieres conocer a uno de los animales de aspecto más curioso del planeta?
Slow loris: características
Los slow loris son mamíferos primates que viven principalmente en el sudeste de Asia. Normalmente se les puede encontrar en países como la India, Bangladesh, Filipinas o la isla de Java.
Existen varias especies de slow loris, aunque se distinguen de manera oficial ocho especies distintas. Son parientes de otros primates conocidos, como los potos, los gálagos o los loris esbeltos, muy similares a ellos, pero se conoce muy poco de su historia evolutiva.
Los loris lentos son, en muchas ocasiones, confundidos con otros mamíferos, como los perezosos, ya que no se parecen a los clásicos monos: su cabeza es redondeada y el hocico más pequeño y los ojos grandes.
Además, los slow loris son animales que poseen diferentes patrones de coloración en su pelaje, dependiendo de la especie. Poseen un largo tronco y unas manos y pies que pueden agarrar cosas con cierta fuerza, lo que les permite sujetarse de forma firme a los árboles.
El comportamiento del slow loris
Curiosamente, el slow loris tiene una peculiaridad que no comparte con el resto de los mamíferos: son los únicos mamíferos que cuentan con glándulas venenosas, en concreto en sus brazos
De este modo, cuando se sienten amenazados comienzan a lamer la glándula, haciendo que las toxinas pasen a la boca del animal. En el momento en que estas toxinas se mezclan con la saliva, se activan, por lo que pueden usar la mordida contra los depredadores o las personas para protegerse.
A pesar de esto, el slow loris, por lo general, es un animal muy tranquilo y solo ataca cuando se siente verdaderamente acorralado. Su estrategia de defensa es quedarse muy quieto en las ramas del árbol en el que se encuentre: solo suele ser atacado por serpientes, águilas y, en algunos casos, por orangutanes.
De este silencioso animal se conoce poco sobre su comportamiento, y su estructura social concreta es desconocida, pero sin duda, sabemos que son animales solitarios.
El loris lento se comunica a través de marcaje olfativo, es decir, marca la territorialidad de los machos.
Igual que ocurre con otros primates, las crías del loris perezoso dependen 100% de sus padres, creando un fuerte vínculo con ellos desde que nacen. Son animales omnívoros, y por lo tanto comen desde fruta, hojas, hasta pueden cazar pequeños animales.
El slow loris amenazado
Por desgracia, el slow loris se encuentra en peligro de extinción según la Lista Roja de las Especies Amenazadas de la IUCN.
Las principales amenazas de estos animales es la fragmentación de su hábitat por problemáticas como el aceite de palma y la tala, pero también, en gran parte estos animales están en peligro de extinción o en estado vulnerable por culpa de la medicina oriental. Por otro lado, la explotación animal sigue siendo una causa que afecta a muchos animales alrededor del mundo, y el slow loris es también víctima de ello.