Los perros a menudo sufren de rinitis, una enfermedad del tracto respiratorio superior que implica la inflamación de las membranas mucosas nasales u otro daño a las membranas mucosas nasales. La infección viral es la causa más común de rinitis o sinusitis repentina en los perros.
En este artículo te explicaremos qué es la rinitis, cuáles son los síntomas más comunes y cuál es el tratamiento más eficaz.
¿Qué es la rinitis en perros?
La rinitis es una enfermedad que afecta tanto a humanos como a perros, causando congestión nasal, secreción nasal, estornudos y picazón. La mayoría de los tipos de rinitis son causados por inflamación y están asociados con síntomas en los ojos, los oídos o la garganta. Los perros con narices y cráneos más largos (como el Border Collie o el Galgo) son los más propensos a la rinitis. Además, las razas braquiocefálicas (como el bulldog o el pug) son susceptibles a tumores inducidos por la contaminación que pueden causar rinitis.
Hay varios tipos de rinitis, estos incluyen:
- Rinitis aguda: es típicamente causada por un cuerpo extraño alojado dentro de la cavidad nasal del perro.
- Rinitis alérgica o estacional: este tipo de rinitis es causada por una acumulación de histamina en el cuerpo como resultado de alérgenos en el aire. El polen, el polvo doméstico, las fibras vegetales y el moho son las sustancias alergénicas más comunes en los perros.
- Rinitis crónica: se desarrolla cuando los alérgenos desencadenantes no pueden eliminarse del entorno del perro o cuando el perro está expuesto regularmente a ellos. En algunos casos, los perros también pueden desarrollar tejido anormal en el área nasal que produce inflamación y causa rinitis crónica. La rinitis crónica también puede ocurrir si su perro tiene una infección viral aguda o si un diente malo está agravando la condición.
Tener una nariz que moquea en un perro puede deberse a algo tan simple como la emoción de verte. Sin embargo, también puede ser un problema de salud grave. Sigue leyendo este artículo para obtener más información sobre las posibles causas de la secreción nasal en los perros y su tratamiento.
Síntomas de la rinitis en perros
La rinitis, como comentábamos, es una inflamación de la cavidad nasal caracterizada por síntomas como:
- Estornudos excesivos.
- La secreción nasal es espesa y maloliente a menos que la esté causando una rinitis alérgica, en cuyo caso es transparente.
- Náuseas o vómitos debido a sustancias que ingresan a la garganta por la nariz.
- Frotar o raspar la cara.
- Falta de capacidad para oler.
- Falta de apetito y, por lo tanto, pérdida de peso.
- Inquietud.
- Respiración con la boca abierta o dificultad para respirar.
- Mal aliento.
- Frotar o tocar la cara.
- Hemorragia nasal.
Deberías comunicarte con tu veterinario si notas alguno de estos síntomas, especialmente si persisten durante más de un día. Dado que los perros perciben el mundo a través de su sentido del olfato, su nariz es una de las partes más expuestas de su cuerpo. Si notas que tu perro se frota constantemente la nariz, podría ser motivo de preocupación. Continúa leyendo este artículo para conocer más sobre la rinitis caninas.
Tratamiento de la rinitis en perros
La rinitis se trata de diferentes maneras dependiendo de su causa. Si hay bacterias presentes, se deben recetar agentes antibacterianos, al menos durante algunas semanas.
Si los hongos están presentes, el antifúngico es el tratamiento más adecuado, también durante algunas semanas. Si la infección es grave y se presenta fiebre, muchos perros requieren líquidos por vía intravenosa.
En perros mayores, a menudo hay crecimiento y presencia de tejido anormal (neoplasia) o enfermedad dental, que también puede causar inflamación. En el caso de la neoplasia, se requiere cirugía para eliminar de forma permanente el tejido anormal en la cavidad nasal. En el caso de una enfermedad dental, por otro lado, puede ser necesario extraer el diente afectado.
En el caso de la rinitis alérgica, el perro debe mantenerse alejado de las sustancias que desencadenan la reacción en primer lugar. Sin embargo, a veces es difícil evitar el contacto con sustancias que causan alergias, que también son cada vez más comunes. Por tanto, el tratamiento consiste en el control de los síntomas, la identificación del alérgeno mediante pruebas cutáneas y, en algunos casos, la inmunoterapia, es decir, la administración de vacunas específicas.
Debemos preocuparnos si observamos problemas respiratorios en nuestros perros. Aunque ciertas razas son más susceptibles a problemas respiratorios que otras, las infecciones respiratorias pueden afectar a cualquier perro.