El perro Kuvasz es una raza antigua de perros criados en Hungría, donde originalmente se usaba como perro de ganado. Es un perro grande, imponente, inteligente, profundamente leal pero exigente, con un tamaño y una fuerza impresionantes. El Kuvasz fue criado durante siglos como perro guardián, pero ha ganado popularidad en las últimas décadas como perro de compañía, ya que es naturalmente protector de su hogar y de sus seres queridos.
Origen del perro Kuvasz
Originario de Hungría, país donde se le conoce desde la antigüedad. Aunque se sabe poco sobre sus orígenes, se cree que sus antepasados descienden de perros asiáticos que acompañaban a los nómadas magiares que vagaban por la cuenca de los Cárpatos. Los magiares usaban estos perros robustos y de pelo grueso para proteger a sus rebaños de depredadores naturales y posibles ladrones.
En el siglo XV, los perros Kuvasz se hicieron muy populares entre la nobleza húngara y acompañaban a los nobles en sus viajes de caza.
En el siglo XX, debido a las dos guerras mundiales y la revolución húngara en la década de 1950, estuvieron a punto de extinguirse: los perros eran tan conocidos por proteger a sus familias que los soldados alemanes y soviéticos los buscaban y los mataban.
Características físicas del Kuvasz
El Kuvasz es un perro grande, rústico e imponente cuya presencia transmite fuerza y nobleza. Según el estándar de raza oficial, la altura a la cruz de los machos varía entre 71 y 76 centímetros, con un peso corporal entre 48 y 62 kilos. Las hembras suelen ser algo más pequeñas que los machos. Observados de perfil, su cuerpo parece estar recostado u horizontal, casi cuadrado, con articulaciones claramente definidas. Las características físicas más importantes de esta raza son:
- Pecho: es largo, profundo y ligeramente arqueado.
- Lomo: es corto, la espalda es firme, ancha, recta y bien musculada, mientras que el vientre está ligeramente recogido.
- Cola: es de inserción baja y acompaña el movimiento descendente de la grupa. Tiene una caída recta y su punta está ligeramente curvada hacia arriba, pero no curvada.
- Cabeza: del Kuvasz es nervuda, en forma de cuña y en armonía con las proporciones del cuerpo del perro.
- Cráneo: es ancho, pero no abrupto, la frente está ligeramente marcada.
- Hocico: es corto. Se estrecha ligeramente hacia la nariz negra y nunca se vuelve puntiaguda.
- Ojos: tienen forma de almendra y están ligeramente inclinados, y generalmente tienen un tono marrón oscuro.
- Orejas: tienen forma de “V” con las puntas redondeadas y están implantadas a una altura media, cayendo paralelas y pegadas a la cabeza del perro.
- Pelaje: es blanco o blanco marfil. También es muy denso y consta de una doble capa de pelo. La capa interna consiste en una capa más lanosa y suave, mientras que la capa externa es densa y ligeramente ondulada, con pelos rígidos y tiesos. En las piernas, las orejas y la cabeza, los pelos exteriores se acortan. La piel es firme y bien pigmentada, con una tonalidad gris pizarra.
El carácter del Kuvasz
Estos perros tienden a formar un vínculo profundo con sus dueños, a quienes defenderán sin dudarlo ante cualquier amenaza. Dado que históricamente fueron entrenados como perros pastores y guardianes, también tienden a ser protectores de su hogar/territorio y la propiedad o los bienes de sus dueños. Por lo tanto, necesitan ser socializados adecuadamente para aprender a responder positivamente a las personas y los estímulos de su entorno.
Cuando se les da el cariño de una familia y se les cría de manera positiva, son perros tranquilos, estables y muy cariñosos. Es igualmente importante recordar que el comportamiento de un perro no solo está determinado por su raza o pedigrí, sino que depende principalmente de la crianza, el entorno y los cuidados que le brinden sus cuidadores. Por tanto, si quieres tener un Kuvasz obediente y equilibrado, debes proporcionarle las condiciones óptimas para su desarrollo físico, cognitivo y emocional y prestar atención a su crianza y socialización temprana.
Salud de los Kuvasz
Como todas las razas de perros, los Kuvasz pueden tener una predisposición genética a desarrollar algunas enfermedades hereditarias y degenerativas. La displasia de cadera y la dermatitis son las condiciones más comunes en estos perros grandes y peludos, pero también pueden ocurrir cataratas y sordera canina.
Además, el Kuvasz puede desarrollar otras enfermedades caninas comunes y es propenso a la obesidad. Por lo tanto, deben recibir una adecuada medicina preventiva durante toda su vida. Recuerda visitar al veterinario cada 6 meses para comprobar el estado de salud de tu perro, mantener su calendario de vacunación y desparasitarlo periódicamente con productos de alta calidad adecuados a su tamaño, peso y edad.
Con los cuidados adecuados, un ambiente positivo y el cariño de sus dueños, el perro Kuvasz tiene una esperanza de vida estimada de 10 a 12 años. ¿Tienes uno de estos grandullones en casa y buscas veterinario en Barcelona? Nos encantaría atenderos. Escríbenos desde este formulario de contacto o llámanos al 932 460 805.