Enérgicos, curiosos y juguetones, los hurones han sabido adaptarse a la convivencia y a las normas de un hogar, quizás por ello es cada vez más frecuente encontrarlos en los hogares españoles como mascota. Domesticados hace miles de años, estos animales requieren de ciertos cuidados especiales que es preciso conocer; en las siguientes líneas, te contamos los cuidados elementales que deberás conocer para tenerlos en casa.

Los hurones son considerados animales exóticos, por tal razón, muchas personas piensan que son agresivos y pueden ocasionar daños o precisan de cuidados excéntricos. Las dudas que surgen al respecto están relacionadas con ciertos factores que influyen al momento de cuidar un hurón. El tamaño de la jaula, el tipo de comida y la disposición adecuada de sus desechos, forman las principales interrogantes hechas por los que adquieren un hurón por primera vez.

Comportamiento de los hurones en su hábitat natural

Tal como el perro viene del lobo, los hurones descienden del turón de campo. Son carnívoros, nocturnos y cazadores por naturaleza. Para saber los cuidados elementales, primero hay que observar sus características primitivas.

Los hurones se esconden constantemente en huecos y espacios oscuros. Tienen un excelente olfato, todo lo contrario a su capacidad visual. La vista es un sentido que no les ayuda, por eso se guían por el olfato.

Esta capacidad de colarse por distintos rincones es lo que hace que criarlos en el hogar pueda ser peligroso para ellos. Los hurones pueden hacerse daño al quedarse atrapados entre los electrodomésticos o cables eléctricos. Suele ser un peligro mortal cuando quedan atrapados en sillas plegables, por lo que se recomienda mantenerlos alejados de este tipo de mobiliarios.   

El cuidado en la alimentación de los hurones

El suministro de agua y comida debe ser continuo, él se encargará de regular las cantidades que ingiere. Es muy importante que se mantenga hidratado.

En la dieta, es obligatorio incluir carne, pollo o proteína animal. No es recomendado darles el alimento crudo ya que la carne podría contener bacterias y enfermarlo. Además, es preciso evitar alimentar al hurón con hidratos de carbono y fibra en exceso.

En el mercado se puede conseguir el pienso para hurón, un alimento con todos los componentes necesarios para su desarrollo saludable. En el etiquetado del paquete debería reflejar entre un 30% y un 35% de proteína animal. Los desechos cárnicos o subproductos no son recomendados.

Para que se mantengan saludables, los hurones deben ingerir entre un 15% a 20% de grasa y un máximo de 4% de fibra. La taurina es un componente mayoritario en el organismo del hurón, es un aminoácido esencial. Las vitaminas A, E y C también son parte de los componentes esenciales.  

El hurón debe evitar algunos alimentos dañinos para su organismo:

  • Chocolates o dulces.
  • Carne o pescado crudo, especialmente la de cerdo.
  • Lácteos.
  • Derivados de la cebolla.
  • Condimentos.
  • El maíz, ya que es demasiada fibra y su sistema digestivo no lo asimila adecuadamente.
  • Restos de comida como huesos de pollo.  

El hábitat del hurón

Los hurones, como mascota, miden entre 35cm y 40 cm de longitud. Cuando están en su entorno natural o vida silvestre, superan este tamaño. Por lo tanto, la jaula debe tener unas medidas aproximadas de 90cm de largo, 60cm de ancho y 70cm de alto. También, debe comprender más de dos niveles para que el hurón pueda moverse cómodamente.

La jaula debe estar colocada en un lugar sin viento y sin luz directa del sol, ya que no les gustan estos climas. Podrían sufrir cambios o ser sometidos a estrés si son expuestos a temperaturas superiores a los 30°C.

Es necesario que entre los accesorios de la jaula haya túneles, una hamaca, cama y objetos seguros que sirvan de juguete. Les encanta jugar y hacer ejercicio.

Si la jaula es suficientemente grande, el hurón podrá realizar sus necesidades dentro de la misma siempre y cuando el espacio esté lejos de su lugar para dormir y comer. En el mercado existen distintos tipos de lecho o sustrato para absorber el olor y la humedad.

Los productos que están disponibles para los gatos, como la arena de arcilla o la Bentonita, no son aconsejables para los hurones ya que al mojarse se adhieren fácilmente al pelaje, patas, nariz y ojos del hurón y es muy difícil de despegar. La arena de sílice y las virutas de Pino tampoco son aconsejables ya que pueden influir perjudicialmente sobre el sistema respiratorio del hurón.

Los que sí son recomendados son los lechos a base de papel reciclado; son económicos, tienen una buena regulación del olor y le brindan calor. Es cómodo para limpiar y tirar, además, cuenta con la cualidad de ser biodegradable. Tampoco causa daños al sistema respiratorio y hepático de la mascota.  

Cuidados en la limpieza de los hurones

Los hurones tienen un olor característico que desprenden de sus aceites característicos del pelaje. Para algunas personas resulta incómodo y cometen el error de bañarlos varias veces creyendo que así se les quitará. Esto es un error muy común ya que se recomienda bañarlo sólo una vez al mes.

Debido a que los hurones no soportan los climas extremos ni los cambios bruscos de temperatura, el agua debe ser limpia y tibia para que se sientan a gusto y se les puedan bañar con comodidad.

Los hurones marcan el sitio en donde viven, por lo tanto, la jaula se debe limpiar profundamente una vez a la semana. El lecho que sirve como baño se deberá cambiar de preferencia cada dos días.

La castración en los hurones

El sistema endocrino de los hurones es complejo, en comparación al de otros animales domésticos. Estos animales son propensos a sufrir insulinomas, tumores que se crean a partir de la aceleración de hormonas cuando el hurón no ha sido castrado. Otra patología es el hiperestrogenismo, que se da cuando la médula ósea se ve afectada por las hormonas.

Cuando se adopta un hurón, la mayoría de las veces el animal está castrado. Es importante informarse sobre el tiempo de castración, ya que la intervención debe realizarse después de los 15 meses de vida. En algunos casos, la castración se realiza antes, lo que le causará problemas endocrinos.

Estos los tumores aparecen porque en las glándulas suprarrenales o adrenales, ubicadas encima de los riñones, se alojan las hormonas y van creciendo hasta producir tumoraciones.

Consejos para el manejo y domesticación del hurón

En el caso de que el hurón o el dueño estén congestionados con síntomas gripales, se recomienda limitar los mimos y la cercanía ya que la infección es fácilmente transmisible.

El hurón es considerado un animal que se domestica fácilmente. En el mercado existen premios que pueden servir para acostumbrar al hurón a realizar sus necesidades en los lugares dispuestos. Aunque también se les puede ofrecer fruta como premio, esta debería ser en cantidades limitadas y como la última opción, ya que contiene mucha fibra.

Quienes decidan tener un hurón como mascota, deberán estar muy pendientes de los cuidados elementales para tenerlos en casa, sobre todo si hay niños en el hogar. Guiar y acompañar al niño en la crianza de esta mascota es fundamental.