Cuando nos referimos a la Gramma Loreto, estamos hablando de uno de los peces más recomendados para acuarios e instalaciones marinas comunitarias. Si se tratase de un vecino en nuestra comunidad, todo el mundo lo querría y lo vería como un buen chico que respeta y cuida el espacio común. ¿Te gustaría conocer más acerca de las características de esta especie y por qué no debe faltar en tu acuario? Presta atención a la información que te ofrecemos.

¿Cómo es la Gramma loreto?

Gramma loreto es una de las especies más tranquilas de carácter que pueda haber. Se trata de un pez más bien tímido y pacífico, que no le gusta ocupar espacio de más y prefiere pasar la mayor parte del tiempo retirado en su refugio. Su resistencia y su facilidad de cuidados, hacen de él un ejemplar perfecto para cualquier acuario. Ya seas aficionado o experto, es un acierto contar con él.

Forma parte de la familia de los Grammatidae (gramátidos), y puede llegar a crecer hasta 8 centímetros de largo, teniendo aproximadamente unos 5 años de vida. En la misma familia se pueden distinguir dos géneros: los Gramma y los Lipogramma. Se conoce que los primeros pueden llegar a medir hasta 10 centímetros y que son originales de la costa oeste del Océano Atlántico. En cuanto a sus colores, son impresionantes: combinan un intenso color púrpura con un amarillo chillón, logrando ser una de las especies más llamativas que existen a nivel visual.

Precisamente por este colorido, es comúnmente confundido con otra especie: el Pseudochromis paccagnellae. Físicamente son muy similares, pero de carácter completamente opuestos: agresivo y algo más difícil de mantener y cuidar. Para diferenciarlos mejor, a parte de la actitud del pez dentro del acuario, podrás observar cómo el Gramma loreto tiene un ocelo en la parte superior de su aleta dorsal, sus aletas también tienen color, y tras las branquias muestran unos pequeños puntos amarillos que se difuminan sobre el color púrpura de la parte delantera.

Necesidades y cuidados de la Gramma loreto dentro de un acuario

Es verdaderamente fácil cuidar y cubrir las necesidades de esta especie. Para el correcto mantenimiento de la Gramma loreto, deberíamos conservarles en acuarios de más de 100 litros de agua, y siempre que sea posible, adaptar el entorno para que sea lo más parecido a su hábitat natural. Como ya te hemos contado al inicio, se trata de un pez al que le gusta resguardarse y sentirse refugiado, así que procura que tenga suficientes lugares donde hacerlo. Por ese mismo motivo, también deberás evitar las luces intensas directamente sobre el acuario.

Otro de los motivos por los que te animamos a contar con una Gramma loreto es por ser grandes limpiadores con los residuos de otros peces: eliminarán gran parte del tejido muerto y los parásitos que se formen en tu acuario, y eso facilitará mucho su limpieza.

Por último, a la hora de alimentarlos, se recomienda hacerlo entre una y dos veces al día, siempre con pequeñas cantidades de comida. Como la mayoría de peces de arrecife, la especie Gramma loreto no mostrará ningún problema con la comida siempre que esta sea lo suficientemente pequeña como para que quepa en su boca. Se alimentan de daphnia, artemia, larvas rojas, comida escamada, etc., pero de vez en cuando es recomendable utilizar krill para que su color se mantenga a buen tono, así como otros alimentos vivos para que esté saludable.