Englobada dentro de las enfermedades denominadas FLUTD – Feline lower urinary tract disease o enfermedades del tracto urinario inferior felino, la cistitis idiopática felina es una patología que se presenta con cierta frecuencia entre los gatos de ambos sexos y que suele ser difícil de diagnosticar.  

Especialmente dolorosa y causante de más del 60% de los cuadros no obstructivos del tracto urinario inferior de los gatos menores de 10 años, la cistitis idiopática felina o cistitis intersticial es un trastorno inflamatorio no infeccioso que es preciso conocer para saber cómo actuar a tiempo. 

Cistitis idiopática felina o cistitis intersticial

La cistitis idiopática felina es una patología que genera inflamación en la vejiga y anomalías en el sistema nervioso central. Su condición de idiopática nos indica que no está del todo claro cuáles son las causas que la desencadenan, aunque los especialistas relacionan su aparición con factores psicológicos y neuroendocrinos.  

Así, cuando el felino pasa por momentos de estrés, desencadena una serie de alteraciones en su organismo que generan una inflamación en las paredes de la uretra. Es importante entender que los antibióticos no son utilizados para tratar la cistitis idiopática ya que esta inflamación no presenta infección. 

Según los especialistas, el estrés produce en los gatos un aumento en sus niveles de tirosina hidroxilasa y se activa el sistema nervioso simpático. Debido a ello, se altera la permeabilidad del urotelio, permitiendo el paso del potasio y calcio presentes en la orina, desencadenando la inflamación. Además, esta condición puede llegar a obstruir a la mascota. 

Por lo general, existen ciertas condiciones que puede llegar a desencadenar la cistitis idiopática en los gatos, como puede ser en caso de mudanza o cambio de hábitat, peleas con otras mascotas de la casa o cambios de hábitos bruscos. Además, los gatos que son asustadizos están más predispuestos a sufrir esta condición.  

Diagnóstico de la cistitis idiopática felina

El adecuado diagnóstico de la cistitis idiopática felina se realiza por exclusión, es decir, como descarte de otras enfermedades que pueden provocar síntomas similares. Así, lo primero que debemos descartar es la presencia de cálculos en la vejiga a través de pruebas clínicas.   

Una primera prueba es la del sondaje, realizada con el fin de extraer muestras de los cálculos para analizar su composición, así como para eliminar cualquier obstrucción que se pueda presentar en el animal. 

La toma de imágenes radiográficas se efectúa con la finalidad de visualizar cualquier presencia de cálculos en la vejiga o la uretra. Esta prueba es complementaria ya que es posible que no se logren visualizar los cálculos con exactitud.  

La ecografía, por su parte, le va a permitir al veterinario analizar la presencia de cálculos y las condiciones que presenta la pared de la vejiga. En paralelo, es recomendable realizar una citopunción al animal, que consiste en la toma de muestra de orina estéril con el fin de observar la presencia de sedimentos.  

Estas pruebas también sirven para descartar otro tipo de patologías como un tumor en la vejiga o uretra, traumatismos, infecciones bacterianas o alteraciones congénitas, aunque estas dos últimas son muy poco comunes en los gatos. 

Cuando se hayan descartado estas patologías, el veterinario puede concluir que se encuentra ante un cuadro de cistitis idiopática felina y determinará el tratamiento más adecuado para la mascota, en base a la condición de la vejiga y la situación de obstrucción que pueda presentar.    

Tratamiento de la cistitis idiopática en los gatos

El veterinario determinará el tratamiento a seguir de acuerdo a si el cuadro de cistitis idiopática felina se presenta con obstrucción o no. En los casos de cistitis idiopática felina con obstrucción, el gato deberá recibir el tratamiento de inmediato ya que podría presentar un cuadro de insuficiencia renal aguda. 

El tratamiento más adecuado consiste en sedar completamente al animal y sondarlo para eliminar la obstrucción. En paralelo y solo si el sondaje no cumple con los resultados esperados, se le realizan lavados uretrales. 

Cuando se presenta la cistitis idiopática felina sin obstrucción, el tratamiento consiste en la aplicación de fármacos antiinflamatorios no esteroideos – AINEs, el aumento de la ingesta de agua, una dieta rica en alimentos húmedos y en la mejora del ambiente en casa para disminuir el estrés en el gato. 

Recomendaciones para los dueños

Los gatos son animales solitarios y territoriales, por lo que es recomendable tomar una serie de medidas en su entorno orientadas a mantenerlos libres de estrés y de cualquier enfermedad relacionada.  

  • En principio, debemos proveer al felino de juguetes con los que pueda imitar la caza; lo recomendable es ir rotando sus juguetes cada cierto tiempo. 
  • Los gatos deben tener un plato especial de comida y otros más para el agua. El área de comida deberá ubicarse en un lugar apartado y alejado de su caja de arena. 
  • El agua, además, deberá ser renovada con frecuencia, a fin de mantenerla fresca siempre. Este elemento es esencial para mantenerlos al margen de la cistitis idiopática felina.
  • Es recomendable que el gato tenga un espacio de descanso en una zona elevada y tranquila de la casa, alejado de las corrientes de aire y de otros animales.  
  • La caja de arena debe permanecer limpia, por lo que es necesario recoger los excrementos todos los días. Además, se recomienda que la caja de arena no sea compartida por más de un gato.  
  • Se aconseja darle amplia libertad al gato para que pueda trepar, jugar y explorar por los distintos ambientes del hogar. 

En los casos de cistitis idiopática felina, tan importante como el tratamiento veterinario y el cuidado en la alimentación es la mejora en el entorno del animal, con el fin de disminuir el estrés y evitar cualquier tipo de recaída. 

Aunque es una patología difícil de tratar, a través de un adecuado diagnóstico, un tratamiento disciplinado y la mejora de las condiciones del entorno, el gato logrará una mejora significativa a corto plazo.